jueves, 29 de diciembre de 2011

SOBRE LA CRIA DE NINFAS EN PAREJAS*

SOBRE LA CRIA DE NINFAS.
ELECCION DE CRIAR POR PAREJAS.

• Elegir poder criar en parejas o en grandes voladeras en colonias.

En primer lugar, todo depende del número de individuos que tengamos y el objetivo que queramos alcanzar.
La cría en pareja depende de la elección de dos individuos de distinto sexo, que al presentar dimorfismo sexual podemos hacer la elección sin muchas complicaciones. Tan solo en algunas mutaciones como lutinas o albinas tendríamos que recurrir a sistemas de sexados como el ADN o la endoscopia si por otros medios no hemos podido.


Para unir la pareja, una vez la hayamos seleccionado por su color, edad, compatibilidad con respecto al parentesco, etc. No debe de existir parentesco entre los miembros de la pareja, para evitar dentro de lo posible la endogamia.
Lo ideal es que tengamos unos días separados a los individuos, con la posibilidad que se vean y se escuchen. Observaremos su comportamiento paso a paso, hasta que decidamos ponerlos en la misma jaula. Es recomendable no ponerlos juntos desde el primer momento.
El primer día lo dejaremos tan solo unas horas juntos y así repetiremos hasta tres o cuatro días. Si vemos que después de tres o cuatro días no hay conflictos lo dejaremos juntos.
Si después de unas semanas vemos que no hay vinculo entre ambos individuos, probaremos a cambiar la hembra ó el macho y repetir la acción hasta que encontremos la pareja perfecta. Una vez que comprobemos que son compatibles, creando un vínculo, éste durará toda la vida.
No debemos de separar a una pareja que esta perfectamente formada, creara una situación de estrés entre ellas y puede que incluso puedan enfermar de depresión.
La medida de la voladera o jaula debe ser de un metro cúbico por pareja aproximadamente, para que puedan volar y estar ejercitadas. Debemos de colocar más de un nido y que sea los individuos los que eligen donde poner los huevos.

lunes, 26 de diciembre de 2011

CARABLANCAS RECIEN NACIDOS

COMO DIFERENCIAR UNA NINFA CARABLANCA RECIEN NACIDA.

Los pollos de ninfas recién nacidos suelen tener un pelillo muy suave de color amarillo que lo conserva hasta que empiezan a salirle los cañones y con ello las primeras plumas.
En los pollos carablanca, este primer pelillo suave algodonado es de color blanco, dado que le falta la sustancia llamada psitácina. Este pigmento, propio de las psitácidas es el que genera los colores amarillos, naranjas y rojos.
La mutación carablanca se hereda de forma autosomática recesiva. Tanto el padre como la madre deben poseer el factor mutante para dar lugar a que los descendientes salgan carablanca.
Os presento una foto donde hay tres pollitos, dos carablanca y uno canela de los mismos padres, con menos de 48 horas de vida y un huevo donde desde su interior empuja otro pollo queriendo romper el cascarón.

sábado, 24 de diciembre de 2011

LOS NIDOS

Las medidas adecuadas de un nido es la suficiente para que la ninfa pueda introducirse, girarse dentro de él y que no se le doble la cola. Presumiendo que una ninfa mide unos 30 cm desde la cola a la cabeza aproximadamente, lo ideal sería que la base del nido ó caja sea al menos de 25* 25 y una altura de unos 30 cm.
En el frontal del nido se le hace un agujero redondo con un diámetro de 7 cm para que pueda entrar y salir sin problemas que se roce su bello plumaje y además pueda incluso alimentar a los polluelos desde fuera cuando estos alcancen un par de semanas de edad. Este agujero debe de estar a una altura de su centro a no menos de 15 cm de la base para que los pollos no se salgan de forma accidental. Por dentro se le puede poner un trozo de tela-metálica, o taco de madera en el lado del agujero que haga a los padres la función de escalera. En el exterior un trozo de palo debajo del agujero para que se posen y así facilite la visión al interior y su entrada.
La puerta se puede colocar en la parte superior ó en la parte trasera afianzada con unas bisagras y candado o mosquetón para que no se abra de forma accidental. En el suelo de la caja-nido pondremos una capa de unos dos cm de virutas de madera (no serrín que podría perjudicar a los ojos de los polluelos e incluso provocarles una conjuntivitis ) para que el suelo no sea tan duro y sobre todo para que los huevos no estén rodando cada vez que los padres salen del nido. Lo colgaremos en la voladera en la parte más alta posible. Siempre elegirán los nidos colocados más altos y protegidos estratégicamente.
El número de nidos debe ser superior al número de parejas que haya en la voladera. Es recomendable que siempre sobren nidos para que no haya conflictos entre las parejas.
El número de parejas recomendable debe ser más de dos para que no haya un macho dominante y acobarde al más tímido.


Se recomienda no empezar a criar antes de que tengan el año de edad, al menos la hembra, pues no está desarrollada completamente y podría darse el caso de que se le quedara algún huevo atascado. Con un macho joven el problema sería el de no ser todavía fértil y desperdiciaría las primeras nidadas, pero eso, salvo raras ocasiones, lo soluciona el tiempo. En la primera nidada normalmente llegan a poner tres o cuatro huevos, pero a medida que van madurando pueden llegar a poner hasta siete ú ocho. Cuando empiezan con el cortejo y el apareamiento, empiezan a buscar y elegir el nido. Encontraremos viruta en el suelo, señal que ya han entrado en alguno de ellos y han elegido su “nido de amor”. El primer huevo lo pone la hembra a partir de las dos semanas de empezar a hacerse “carantoñas”, darse “piquitos” y acurruco en el cuello. Los demás huevos los ponen a intervalos de 48 horas hasta el final de la puesta. Entre el primero y el último puede haber una distancia en el tiempo de dos semanas, por lo que el nacimiento se produce en el mismo orden de la puesta. Es por eso que no todos los pollos llegan a buen fin .El periodo de incubación dura 20 días. En los días previos al nacimiento podremos observar como ambos progenitores se humedecen el plumaje en los bebederos para controlar la temperatura y con ello la humedad, y así favorecer la eclosión de huevos.
Nada más empiezan a nacer no falta alguno de los progenitores en el nido, evitando que le falte calor a los pequeñines. Cuando el más grande tiene 10 ó 12 días, el más pequeño acaba de nacer, éste, en ocasiones es aplastado por los hermanos, lleno de caca, ó incluso los padres no le alimentan lo necesario y mueren. No obstante, no es extraño encontrar parejas que críen nidos con 5 y 6 pollos.


En el caso de que el número de pollos sea muy numeroso y exista una diferencia de edad entre ellos muy grande, se pueden retirar los mayores y criarlos a mano ó en su defecto, quitarle los más pequeños en el caso que tuviéramos otra pareja criando polluelos de menos edad y utilizarla como pareja adoptiva o nodriza. No suele haber problemas en esto, los acepta muy bien. La precaución que tenemos que tener es tener las manos muy limpias durante la manipulación, que no les trasmitamos olores desagradables y extraños.
Cuando los pollitos alcanzan una edad de unos 9 ó 10 días es el momento de anillarlos. A partir de ahora tienen los ojos abiertos y cada vez que abrimos el nido y les molestamos harán unos movimientos de cabeza balanceándose de lado a lado y un ruido como si fuera un gato para asustarnos.
Al mes de vida las ninfas bebés abandonaran el nido y no volverán más a él. Los padres seguirán alimentándoles dos o tres semanas más hasta que sean totalmente autónomos. Aun así ellos seguirán pidiéndoles comida a sus progenitores.
Empiezan comiendo panizo, fruta, huevo duro, etc. Y a dar vuelos sin control. Tropiezan con las paredes de la voladera y no controlan bien las timoneras.
En unos días prescindirán totalmente de los padres y convivirán con ellos sin problema alguno. Los padres iniciaran de nuevo el procedimiento en otra nidada y los pollos serán completamente autónomos a los dos meses .Con unas 20 semanas empezaran a cambiar la pluma y a poderse diferenciar su sexo. Empezará un nuevo ciclo de vida.

lunes, 5 de diciembre de 2011

ALIMENTACION DE LAS NINFAS

LA ALIMENTACIÓN DE LA NINFA ADULTA.

La ninfa adulta deben tener una alimentación equilibrada, sin excesos de grasas.
Podemos preparar una mezcla de semillas ó adquirirla en cualquier comercio especializado a base de:
-Mijo rojo.
-Mijo amarillo.
-Mijo blanco.
-Avena pelada.
-Alazor.
-Trigo.
-Pipas Iregui.
-Pipas de girasol negras.( No más del 8 ó 10% del total de la mezcla).
-Frutos secos como almendras, cacahuetes( sin abusar por su alto contenido en grasas).


Se le puede colocar algunas tiras de panizo en la jaula.
Además, debemos acompañar su dieta diaria con verduras y frutas. Les encanta la verdura como las coles, repollos, brócoli, acelgas, lechugas, hojas de rábano, zanahorias ralladas, calabacín, calabaza, etc. Es conveniente enjuagarlas antes de colocárselas si no estamos seguros de su procedencia por si han estado tratados con productos fitosanitarios.
Puede que a tu ninfa le guste más una verdura que otra. Sobre gustos ya sabemos.
Nunca se le debe dar perejil ni aguacate; sería veneno para tus pájaros.
Como frutas, yo les doy manzana muy a menudo.

Siempre es bueno añadir a su dieta un hueso de jibia que la puedes comprar en la tienda de animales ó bien pedirle a tu pescadero que te las guarde; es bueno por el calcio y para ejercitar el pico, ó bien una piedra de carbonato calcico.

Cuando están criando, se les puede hacer un aporte extraordinario de proteínas y de calcio poniéndoles huevo duro con cáscara.
No le debe de faltar agua limpia y fresca a diario.
Los restos de fruta, verduras, huevo, etc., que les sobre del día se les debe de retirar para que no fermente, ya que si comieran restos de comida fermentada podrían enfermar.
La jaula o voladera deberemos de limpiarla periódicamente, evitando el acopio de excrementos para evitar que lo picoteen.
De esta manera tendremos unas ninfas sanas por su alimentación. Si además hacen ejercicio en su voladera tendremos una ninfa sana, equilibrada física y psicológicamente.